Noche de plenilunio

En esta noche de plenilunio, decorada por retazos de nubes peligrosamente grises, la tristeza me inunda completamente.

Ignoro lo que pasó, así como ignoro lo que ella cree que pasó. Un silencio ruidoso, incómodo e injusto. Una ausencia presente en todo momento, por los recuerdos vividos y los objetos que me rodean bañados de su esencia.

Rebobinar el tiempo, eso quiero. Y hacer lo opuesto a lo que hice, eso quiero. De esa forma hoy estaría acá.

Si, que esté acá. Eso quiero.

Pero hoy me toca no disfrutar esta noche de plenilunio, porque la recuerdo, y la tristeza me inunda completamente.

El aire se condensa, la bruma me golpea, y las escalas de grises no solo estan en las nubes, sino en mi vida. Llegó la hora de que haya color. Me lo merezco.

Cierro los ojos, suspiro profundamente, y dejo ir de una vez y para siempre esta tristeza. 

Solamente espero que ella esté bien y feliz. Eso quiero.

Los Gemelos

He viajado a un pasado que no existe. Un pasado animado de un par de personajes bastante conocidos, pero bastante bastardeados por su escasa creatividad a la hora de usar sus poderes.

Y he descubierto que estos personajes, no solo ern brillantes, sino que lo único poderoso que tenían era su brillantez.

Pude ver con claridad cuando empezó todo, cuando encontraron los anillos. Cada anillo estaba dentro de un paquete, y como justo eran dos, quedaron muy conformes al decidir que iba a ser uno para cada uno. 

Al abrirlos y ver unas breves instrucciones, comprendieron que eran anillos mágicos. En las primeras hojas se especificaban lo que hacía cada uno: uno transformaba a su portador en algun objeto, y el otro lo transformaba en un animal. 

El tema es que mas adelante, para desilusión efímera de los gemelos, la lista de posibles opciones era muy corta: 5 opciones para cada anillo.

Y usando su gran intelecto, hicieron creer a todos que eran mucho mas poderosos, y lograron llegar a la Liga de la Justicia. 

Chapeau ante ellos...